Cuando me enteré que Colin estaba nominado al Oscar, por su brillante interpretación en la pantalla gigante del rey británico Jorge VI, en mi corazón supe que la estatueta era suya. Cual fue mi feliz sorpresa cuando esta mañana leí en Ansa.it que mi instinto no había fallado. Y es que este actor británico es uno de esos que pasará a la historia por su profesionalidad, austera personalidad e increible interpretación de los más variados y complicados papeles que el cine continúa a regalarle.¡Felicidades Colin! espero de corazón que este sea el primero de una larga serie de reconocimientos a nivel mundial, pues eres grande y te lo mereces.
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