Es increíble la fuerza con que la naturaleza se impone. Un ejemplo lo vivimos hace poco con el desastroso Sutnami que devastó las costas del Japón y en la que todavía la vida se esfuerza por retomar su ritmo. Y qué decir de los tornados que están golpeando duramente algunos estados en el sur de los Estados Unidos, entre ellos Alabama, que hoy cuenta 223 muertos, el Tennessee con 34, Mississippi con 33, Georgia unos 15. Últimos en la lista Arkansas, Virginia y Louisiana con 6, 8 y 2 víctimas respectivamente.
El presidente de la super potencia americana, Barack Obama, se declaró impresionado, pues hasta hoy no había visto de persona una tal devastación.
Esperemos que la naturaleza nos de una pausa de tanta muerte y sufrimiento, resta decir que mucha de la culpa recae sobre nosotros que no hemos aprendido a tratar a nuestra Madre Tierra con el respeto que se merece y que al parecer insiste en recibir a la fuerza, si necesario.
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